De dentro a fuera

Bueno, yo a este tipo le debo no haber descubierto el cine, pero sí el haber aprendido a amarlo con su pasión.

Le debo también montones de noches sin dormir. De hecho, y cómo conté en mi antiguo blog, le llamé un día a su "Polvo de Estrellas". Y casi mejor que no cuente lo que ocurrió.

Sus últimos años provocan vergüenza ajena. Se ha rendido a todo contra lo que luchó en sus mejores días. Cameos en "Torrente" incluidos. Prefiero quedarme con los recuerdos de mi infancia. Sus cabreos sin cuento. Sus notas gastronómicas fuera de lugar (huevos fritos con puntilla!!!). Y cómo no, con su grito de guerra: FIBREGRAAAAAAN.

Saludos.
 

Muchas gracias por tu comentario, Álex. ¿Sigue existiendo un enlace que lleve a leer eso que contaste? Si no, te ruego que lo cuentes de nuevo.
 

Participé una vez, cuando estaba en el insti, en su programa con una llamada. Un histrión, enciclopédico, eso sí, pero un histrión.
OBRA MAESTRAAAAAAAAA
 

Lo lamento, pero aquel primer blog desapareció sin dejar rastro.

En cuanto a la llamada, no te ofendas pero prefiero no revivirlo. Baste con decirte que mi hermano la grabó (en una cinta de cassette) y que aún (tantos años después) la sigue sacando, aprovechando reuniones familiares, para cachondearse de tan traumática experiencia.
 

Me recuerda a una profesora de Geografía con la que te reías bastante en clase hasta que eras tú mismo la víctima escogida a la que torturaba. Entonces ya no te havían tanta gracia sus "sobradas". Como me parece que dice en la entrevista, probablemente si no fuera así, hubiera pasado sin pena ni gloria, casi nadie sabría de su existencia...
 

Solo una cuestión sobre algo que acabo de leer. Los debates de Garci eran en directo. Lo dijeron en muchas ocasiones: quejándose del frío del estudio a determinadas horas, haciendo alusiones a los visionados recien terminados, quejándose de los doblajes que debían sufrir (de no ser en directo no tendrían motivo para hacerlo). Es más, cuando no eran en directo, por coincidir con días festivos per example, lo advertían previamente.

Lógicamente no puedo demostrar la anécdota de Cobos emocionado tras el visionado de la película de Lubitsch. Suelo tirar de memoria y puedo equivocarme. No es el caso. Algo así no se olvida, por infrecuente.
 

Pumares es uno de los tíos que más sabe de cine en este país. Es el google del cine. Pero odia a Woody Allen, y desde que comenzó a aparecer en la tele se convirtió en una parodia de sí mismo. Una pena.
 

Desde luego yo no me podía dormir escuchando su programa, no era normal y tenía sus momentos. En esa época además creo que también estaban los goma espuma, el caso es que me pasaba el día grabando canciones, comentaríos, y paridas en cintas para luego oírlas en viajes, de camping, etc con los amigos.
 

Vi a Pumares en un festival de cine leyendo una novela. Me pareció un tipo tímido alejado del histrión que representaba en radio y del mamarracho de la tele. Añoro al Pumares de Polvo de Estrellas y aún más al que seleccionaba las pelis de la Clave, que me descubrió que otro tipo de cine era posible.

Si queréis volver a escuchar lo de
Fibergran
 

Viví con Pumares el estreno en San Sebastían de la celebérrima E.T.
Creo que ya pasé por esta entrada y conté lo que viví.
En cualquier caso: un tipo sensible que, como todos, necesita sobrevivir en un mundo pugnetero.